Morelos/ Por Verónica Bacaz
Un alumno de nombre Ernesto “N” de la Universidad del Bienestar ‘Benito Juárez’ ubicada en Tlaltizapán, Morelos agredió a la profesora Jatziri “N” con un arma blanca en el cuello, situación que puso en riesgo su vida y tuvo que ser trasladada de inmediato a un hospital de la región, el estudiante fue detenido y presentado ante la Fiscalía General del Estado.
Con base en información oficial, después de que el joven atacó a la docente, Ernesto intentó escapar hacia la sierra pero fue alcanzado por los vecinos, sin que hasta el momento se tenga claridad de los motivos que llevaron al alumno a intentar asesinar a su maestra y ocasionarle una herida que ameritó tres centímetros de suturación.
Sin embargo, el plantel educativo emitió un escueto comunicado después de este hecho violento, en el que anunció la suspensión de clases y se detalló que las clases se retomarán el jueves, pero antes todos los alumnos tendrán que presentarse con una credencial que expide la institución, si no, no podrán entrar; al último el documento refiere que la profesora Jatziri “N” “se encuentra bien y sin riesgo físico, está mucho más tranquila”.
Respecto a este caso, las autoridades estatales y federales no contaban con información certera del acontecimiento, se le cuestionó al delegado de Bienestar, Raúl Anaya y refirió no contar con información al respecto y que quien debía atenderlo es la directora del programa de la SEP Raquel Sosa.
Sin embargo, se solicitó información vía telefónica con Ricardo Sabbagh, representante de la SEP en Morelos, pero no hubo respuesta a la solicitud. Hasta que la Fiscalía General del Estado confirmó la presentación del joven ante el Ministerio Público en su unidad en la Región Sur del estado.
Universidades del bienestar y profesores con sobrecarga
El hecho causó indignación entre ciudadanos de la Zona Sur de Morelos, ya que de esta manera se reveló la sobrecarga de trabajo para el personal docente de estas instituciones.
Diana Guerrero, alumna de la UBBJ comentó que desde el 2019 que abrió el plantel solo ha contado con una planta académica de tres profesores; una profesora más que se encarga de atender al menos a ocho generaciones de alumnos entre turno matutino y vespertino.
De hecho comentó que la profesora Jatziri “N” ingresó como asistente académica “y además de desempeñar sus labores, se incorporó tomando algunos grupos para aligerar la infame carga (de trabajo) que cuatro miembros del profesorado llevan sobre sus hombros”, narró.
Agregó que incluso «la responsable de la biblioteca ha tenido que sumarse a brindar clases en las aulas y realizar labores extraordinarias para cubrir la meta organizacional que el plantel y el alumnado requieren. Es decir seis profesores sin sueldo extraordinario, para coordinar evaluaciones, eventos, protocolos de seguridad, plan de trabajo calendarios etc; todos ellos deben estar 24/7”, expresó Diana Guerrero.
Aunado a ello, señaló que el plantel el cual consideró “un cascarón” no cuenta con energía eléctrica, la carretera en donde está ubicado sin alumbrado público y el hospital más cercano está a 45 minutos; de hecho el internet no es suficiente y son evidentes las carencias académicas.
Los alumnos se han quedado sin clases, debido a la falta de personal docente por tanto, algunos asisten en horarios extendidos para no atrasarse en el plan de estudios.